Los motivos para la composición de estas dos obras y su ejecución representan extremos opuestos. El cuarteto de Arensky en una elegía, pieza fúnebre a la memoria de su amigo y venerada figura, Tchaikovsky, fallecido en 1893.

En esta oportunidad, el Cuarteto Manolov ejecutará fragmentos de algunas de las obras rusas más reconocidas. La mayoría de las piezas provienen del repertorio de los compositores del período romántico de la Rusia imperial en la que gobernaba el zar.

Anton Rubinstein (1829 – 1894) fue compositor, director de orquesta, maestro y pianista. En un arrebato de inteligencia práctica, su abuelo hizo que toda la familia se convirtiera del judaísmo al catolicismo ortodoxo ruso cuando Rubinstein tenía cuatro años.