Concierto 9 – Cuarteto Borodin: cuartetos de cuerdas de Arensky y Borodin

Tercera edición del Festival Internacional de Música Clásica de Bogotá
Bogotá es la Rusia Romántica, 12 al 17 de abril de 2017

17 escenarios en 10 localidades de la ciudad
50 conciertos, 19 compositores y 45.477 asistentes

Concierto No. 9

Teatro Estudio

Jueves 13 de abril de 2017, 13:00

Cuarteto Borodin, Rusia

Anton Arensky (Rusia, 1861 – 1906)

Cuarteto No. 1, Op. 11 (1888)

I. Allegro

II. Andante sostenuto

III. Menuetto. Allegretto

IV. Finale (Variations sur un thème russe). Allegro non troppo

Alexander Borodin (Rusia, 1833 – 1887)

Cuarteto de cuerdas No. 2 en re mayor (1881)

I. Allegro moderato

II. Scherzo. Allegro

III. Nocturne. Andante

IV. Finale. Andante – Vivace

Resulta asombrosa la cantidad de artistas rusos, desde el siglo XIX y hasta comienzos del XX, que fue presa del alcohol, el juego, las deudas, la comodidad perniciosa de una vida burguesa que no podían sufragar, el sistema de pensiones y salarios sin labores de provecho, la enfermedad temprana y una producción admirable y prometedora. Desde escritores como Pushkin y Dostoievski, pasando por compositores como Musorgsky, Arensky fue otro de los complicados en tales circunstancias. Arensky se formó en el Conservatorio de San Petersburgo, la capital imperial, donde fue alumno de Rimsky-Korsakov y en 1882, tan pronto se graduó, partió al conservatorio de Moscú para ejercer la cátedra de armonía y contrapunto. Entre sus alumnos se cuentan algunos de los compositores más destacados como Rachmaninov, Gliére y Scriabin; y tuvo estrecha relación con otros renombrados como Taneyev y Tchaikovsky. Al parecer, el alcohol y unos hábitos desordenados ya eran frecuentes antes de recibir una pensión suficiente para vivir con comodidad, entregado aún más al desorden que debilitó su cuerpo. El contagio con tuberculosis terminó con su vida rápidamente, cuando apenas mediaba los cuarenta y cinco. En el presente cuarteto se nota la influencia de sus maestros de San Petersburgo y, en la estructuración de la forma, resalta un conocimiento de las prácticas académicas corrientes. Los tres primeros movimientos están marcados por la preponderancia melódica en tanto que el cuarto y último hace interesante uso de las cuerdas pulsadas, con realce del ritmo. Arensky sólo compuso un cuarteto de cuerdas más, para la poco frecuente formación de violín, viola y dos chelos.

Los padres de Borodin eran siervos registrados en el libro de propiedades de sus amos. Con su talento y esfuerzo salió adelante y, si aquí se lo recuerda como compositor, no debe olvidarse que no recibió ninguna educación formal en este terreno y que su campo fue el de la medicina, las investigaciones científicas en química y un activismo práctico para permitirle a las mujeres rusas estudiar, formarse en medicina y sobreponerse a la condición de menosprecio que sufrían. Mientras se encontraba en Heidelberg llamado por su oficio de químico, conoció a Ekaterina Protopopova con quien más tarde se casó. Hay quienes afirman que fue ella quien alentó a Borodin a que prestara cuidado a la situación de las mujeres en Rusia. La producción musical de Borodin sufrió debido a su trabajo en los otros campos de su interés para sobreaguar en lo económico. Su horario, como el de Ekaterina, iba al contrario del de los demás: dormía buena parte de las horas de luz, vencido por el agotamiento de la vigilia que le causaba el asma a su esposa. De noche leían juntos, él trabajaba en sus papeles y proyectaba cursos de formación para mujeres jóvenes. Rimsky-Korsakov siempre lamentó que Borodin no hubiera tenido más tiempo para la música, lo que hizo que muchas de sus obras quedaran sin terminar cuando murió a los sesenta y cuatro años. El presente cuarteto es una excepción. Lo compuso en muy breve tiempo y no le demandó revisiones. En opinión de algunos estudiosos, la obra sería un homenaje a su esposa. La pieza está muy bien lograda en términos de su forma, con predominio cantable de la melodía.

Cuarteto Borodin (Rusia)

El Cuarteto Borodin se formó en 1945 por estudiantes del Conservatorio de Moscú bajo el nombre de Cuarteto de la Filarmónica de Moscú. Su primera conformación estable tuvo a Rostislav Dubinsky y Vladimir Rabeij, violines, Rudolf Barshai, viola y Valentin Berlinsky, chelo. A su vez, luego de dos años, Nina Barshai, esposa de Rudolf, remplazó a Rabeij y en 1952 ella cedió su puesto a Jaroslav Alexandrov. Al año siguiente, el mismo día, ocurrieron los funerales de Stalin y de Prokofiev y en ambos tocó el Cuarteto. 1953 fue también cuando Barshai abandonó el cuarteto para seguir su carrera de solista y director y su lugar lo ocupó Dimitri Shebalin. En 1955, con la conformación de Dubinsky, Alexandrov, Shebalin y Berlinsky el Cuarteto adoptó el nombre que tiene en la actualidad. Cuando los violinistas dejaron el Cuarteto fueron remplazados por Mikhail Kopelman y Andrei Abramenkov. Además, tras la disolución de la Unión Soviética las giras se hicieron más intensas dada la facilidad de viajar al exterior. En los noventa, Ruben Aharonian asumió como primer violín e Igor Nadin como violista. Finalmente, en 2007 llegó como chelista Vladimir Balshin. Así, el Cuarteto Borodin supera siete decenios de actividad.

Su afinidad con el repertorio ruso gira en torno a compositores como Shostakovich, quien trabajó directamente el montaje de sus cuartetos con esta agrupación, Borodin, Tchaikovsky, Glinka, Stravinsky, Prokofiev y Schnittke. Los cuartetos de Schubert y Beethoven también hacen parte de su repertorio. Músicos destacados han acompañado al Cuarteto en el repertorio de cámara, entre ellos se encuentran los pianistas Sviatoslav Richter, Elisabeth Leonskaya, Christoph Eschenbach y Boris Berezovsky; el violinista Yuri Bashmet; el clarinetista Michael Collins y el chelista Mario Brunello. El Borodin ha grabado para los sellos EMI, RCA, Teldec, Chandos, Decca y Onyx.