Concierto 11 – Augustin Dumay y Momo Kodoma: sonatas para violín y piano Op. 12 No. 1 y Op. 30 No. 1
Primera edición del Festival Internacional de Música Clásica
de Bogotá, Bogotá es Beethoven, 27 al 30 de marzo de 2013
11 escenarios en 8 localidades de la ciudad
56 conciertos, 420 artistas y 37.940 asistentes
Concierto No. 11
Teatro Estudio
Jueves 28 de abril de 2013, 14:30
Augustin Dumay, violín, Francia
Momo Kodama, piano, Japón
Sonata para violín y piano en re mayor Op. 12, No. 1 (1797 – 1798)
I. Allegro con brio
II. Tema con variazioni: Andante con moto
III. Rondo: Allegro
Beethoven compuso sus diez sonatas para violín y piano en un período de apenas 15 años. En contraste con sus sonatas para piano solo, se nota una factura menos impresionante a la vez de un estilo más acorde con lo que otros compositores estaban escribiendo. Esto no implica que se limitara a seguir la corriente porque, comparativamente con las sonatas de sus colegas, el violín tiene aquí un papel más equilibrado y es protagonista antes que seguidor, de manera que aún si la mayor parte de la textura musical está marcada por el sonido del piano, estamos ante la apertura de una nueva etapa para el violín.
Esta sonata mantiene, en general, un aire jovial. El primer movimiento, en forma sonata presenta el tema expuesto por ambos instrumentos para diferenciarlos pronto y asignarles lo que caracteriza a esta forma musical como teatro en música, que en este caso consta de dos personajes bien definidos que sostienen un diálogo. El segundo movimiento es en forma de tema, presentado por el piano y luego encargado al violín, con cuatro variaciones en las que primero se destaca el piano, en la segunda lidera el violín y en la tercera están ambos balanceados antes de hacer la cuarta entre los dos instrumentos que tienen un buen entendimiento. El tercer movimiento es un rondó alegre de principio a fin.
Sonata para violín y piano No. 6 en la mayor Op. 30 No. 1 (1801 – 1802)
I. Allegro
II. Adagio molto espressivo
III. Allegretto con variazioni
Las sonatas del opus 12 conservan todavía algo del espíritu del dueto instrumental, en el sentido arraigado en la música europea del siglo XVIII, donde dos instrumentos ejecutaban piezas que podrían tocarse de manera equivalente por otro par de instrumentos distintos. En cambio, las tres sonatas para violín y piano del opus 30 entran en el terreno de las sonatas, pues los instrumentos no son intercambiables sin que haya una mengua considerable en la calidad de la música. La estructura de la obra resulta de una construcción que elaboran ambos instrumentos, no uno u otro. La característica dramática y el carácter dialogante de la forma sonata, se ubican en estas piezas del opus 30, más cerca de lo que Beethoven estaba haciendo con sus sonatas para piano. Todo el opus está dedicado al zar Alejandro I, quien para 1801 simpatizaba con las ideas de Napoleón en lo que apuntaba hacia una feliz terminación de hostilidades entre el emperador guerrero de los franceses y este autócrata con una misión divina, monarca de Finlandia, Polonia y Todas las Rusias. Como lo recuerda la historia, más tarde el Zar llamó tirano a Napoleón, quien intentó y falló, su invasión a Rusia.
Como en la sonata opus 12 no. 1, las formas elegidas por Beethoven para estructurar los movimientos son los de la sonata para el primero, rondó para el segundo y tema con variaciones para el tercero. No obstante, los primeros dos movimientos también presentan elementos sobre los que se desarrollan variaciones. Resaltan el balance entre los instrumentos y la ausencia de pasajes de especial dificultad técnica, en beneficio del equilibrio y de una permanente propulsión y avance.
Augustin Dumay, violín (Francia)
Representante de la escuela del violín en la tradición clásica europea y, en particular, de su rama franco-belga, que viene de Ysayë y Grumiaux. A partir de sus conciertos con la Filarmónica de Berlín, dirigida por Karajan y de las grabaciones que hicieron juntos para EMI, Dumay llamó la atención del público europeo. También se destacó tocando los conciertos de Mendelssohn y de Chaicovsqui con la Sinfónica de Londres, así como por las grabaciones para Deutsche Grammophone de los conciertos de Mozart, que dirigió y ejecutó como solista con la Camerata Académica de Salzburgo. Se le reconoce también por la integral de las sonatas para violín y piano de Beethoven con Maria Joao Pires, grabadas en DG.
En 2011 fue el director invitado principal de la Filarmónica de Kansai en Osaka, y es el director musical de la Real Orquesta de Cámara de Valonia en Bélgica.
Es uno de los maestros en el proyecto piloto europeo de excelencia musical Chapelle Musicale Reine Elisabeth con base en Bruselas donde enseña a violinistas del más alto nivel, muchos de ellos ganadores de los concursos más importantes del mundo.
El director Gérard Corbiau entre cuyas películas se encuentran El Maestro de Música y Farinelli hizo un documental sobre Dumay que circulará en DVD.
Lleva más de cuarenta grabaciones que le han valido premios de Gramophone, Audiophile audition, Preis der deutschen Schallplattenkritik, Grand Prix du Disque, The Record Academy Award.
En 2012 grabó los conciertos para violín de Beethoven y de Brahms.
Momo Kodama, piano
Momo y su hermana, la también pianista Mari, con quien toca a dúo, nacieron en Japón. La familia se radicó en Alemania poco después de que Momo cumpliera un año; al cumplir 13, Momo se trasladó a París donde ingresó al Conservatorio Nacional Superior para estudiar con la pedagoga Germaine Mounier y a los 16 obtuvo su diploma y continuó su formación con los pianistas Perahia, Schiff, Gornostaeva y Nikolaieva. Momo fue la pianista más joven en ganar el concurso de piano de Munich en 1991.
Ha tocado con las principales orquestas de Japón y actuado con directores tan reconocidos como Ozawa, Dutoit, Inbal, Gergiev, Foster, Nagano y Norrington junto a orquestas sobresalientes en Europa y Norte América. Sus recitales tienen lugar en algunas de las salas más renombradas del mundo, y ha tocado música de cámara con colegas igualmente reconocidos.
Mucho del trabajo de Momo se desarrolla alrededor de la música moderna y contemporánea. A petición de Yvonne Loriod, viuda de Olivier Messiaen, estrenó la Fantasía para violín y piano (1933) del compositor, pieza que permanecía ajena al público.
En 2008, Momo le encargó al reconocido Toshío Hosokawa una obra con la misma instrumentación que el Cuarteto para el Fin de los Tiempos de Messiaen y en 2012 inició un programa de conciertos en Japón, lo que ya le valió un premio de ese país. El evento está proyectado a 5 años a lo largo de los cuales encargará cada año una obra nueva a compositores de su elección.
Las notas realizadas por Ricardo Rozental para los programas de mano se elaboran por solicitud del Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo a quien pertenecen la totalidad de los derechos patrimoniales: www.teatromayor.org